
El 13 de Noviembre falleció nuestro compañero el Prof. Dr. Juan Ramón Castillo, nuestro más sentido pésame desde la SEQA. Descanse en paz
Licenciado en Ciencias Químicas (1971) y doctor en Química (1974) por la Universidad de Zaragoza con Premio Extraordinario de Doctorado, Juan Ramón Castillo desarrolló su trayectoria académica en la Universidad de Zaragoza como Profesor Ayudante (1972-1974), Profesor Adjunto y Agregado Interino (1974-1982) y finalmente como Catedrático desde 1982. Estuvo involucrado en la enseñanza de la Química Analítica desde 1972 y promovió la creación del Máster Interuniversitario en Nanotecnología Medioambiental entre las Universidades de Zaragoza, Lleida y Pública de Navarra.
El Profesor Castillo fue fundador e investigador principal del Grupo de Espectroscopía Analítica y Sensores (GEAS) hasta 2018. Contribuyó a la creación en 1986 del Laboratorio Central de Análisis (actual Laboratorio de Análisis Químico), perteneciente a los Servicios de Apoyo a la Investigación de la Universidad de Zaragoza, siendo su director hasta 2009. Asimismo, fue el promotor del Instituto Universitario de Investigación en Ciencias Ambientales de Aragón (IUCA) y su primer director desde 2008 a 2016.
Durante su trayectoria investigadora, fue coautor de 240 artículos científicos y 4 libros, así como de más de 600 ponencias en congresos nacionales e internacionales. Coordinó 30 proyectos nacionales, 2 proyectos europeos, así como más de 40 contratos con empresas. Dirigió o codirigió 35 Tesis Doctorales. Organizó y presidió 6 congresos científicos, 3 de ellos de carácter internacional. Fue investigador visitante en las universidades de Southampton, Cincinnati y en el Laboratorio Nacional Lawrence Berkeley de la Universidad de California. En 2016, la Sociedad Española de Espectroscopia Aplicada le concedió el Premio “Francisco Álvarez” por su excelente trayectoria científica.
Como gestor universitario, fue Director del Departamento de Química Analítica durante tres mandatos, delegado del Rector para Departamentos y miembro de Junta de Gobierno y del Consejo Social. También fue Rector y Vicerrector de Investigación en funciones de esta Universidad.

Foto:: La nueva España
Recientemente ha fallecido Agustín Costa García, Catedrático de Química Analítica en la Universidad de Oviedo. Un verdadero Catedrático, habría que añadir, de los que saben identificar las ideas que merece la pena desarrollar, atraen a gente con talento, son escuchados por los colegas con atención y deferencia y abren nuevos caminos. Además, el profesor Costa supo sacar partido de los medios de los que disponía para conseguir más de lo que cabría esperar y supo extraer de sus colaboradores lo mejor de cada uno para lograr un fin común, gracias a su entusiasmo y generosidad.
Sus aportaciones científicas al campo de la Química Analítica, especialmente a la Electroanalítica aplicada a sistemas biosensores, son extraordinarias. Entre sus múltiples logros, cabe destacar que fue uno de los pioneros en el uso de marcadores metálicos como alternativas a los enzimas, especialmente marcadores nanoparticulados. Su amplio conocimiento de la electroquímica, en el sentido amplio de la palabra, le permitió impulsar uno de los grupos de investigación punteros en este campo, a nivel nacional e internacional.
Además, su idea de lo que debía ser la investigación no se limitaba a la excelencia académica, sino que procuraba que sus ideas y resultados tuvieran un impacto rápido en la sociedad. Tanto es así que creó cuatro empresas spin-off, tarea muy complicada, sobre todo en época de crisis. Aunque contó con cierta ayuda pública, tuvo que convencer a distintos inversores particulares y hubo de animar a sus estudiantes para que afrontaran los riesgos de echar a andar su propia empresa. Los resultados han sido francamente positivos. Cabe destacar que la primera, Dropsens, forma parte de la multinacional Metrohm; y la segunda, Healthsens, acaba de lanzar al mercado un dispositivo de pequeño tamaño para “detectar patologías renales con una gota de sangre”, tal como recogen diversos medios de comunicación, que se han hecho eco de este importante logro.
Agustín ayudó a mucha gente de muchas maneras, perdonó a los que le habían perjudicado y se enfrentó valientemente a su enfermedad, sin duda motivado por sus fuertes convicciones religiosas.
Se ha ido una gran persona y un gran Químico Analítico. Una gran pérdida, sin duda.
Dr. Jorge Ruiz Encinar
Department of Physical and Analytical Chemistry
University of Oviedo